El seguro de caución es una herramienta básica para proteger un contrato de arrendamiento, perfecto para solucionar el clásico problema de falta de garantías.
Si eres inquilino y estás buscando un lugar para mudarte, probablemente conozcas la importancia de tener una garantía para lograrlo, o tal vez sea porque buscabas una garantía propietaria para alquilar en CABA.
Pero hoy te contaremos cuáles son los requisitos para contratar un seguro de caución.
La media sanción en diputados de la nueva ley de arrendamiento abrió el debate sobre las nuevas formas de garantías y la necesidad de flexibilizar su aceptación en el mercado inmobiliario argentino.
Los resultados de una encuesta hecha para conocer la situación de los argentinos muestran que el 73,8% de los inquilinos tienen problemas para obtener una garantía.
Si bien la mayoría (81,5%) respondió que un familiar o amigo era el garante, otros optaron por contratarlo a través del seguro de garantía de una compañía de seguros (11,7%), de una empresa privada (4,65%) o mediante aval bancario (2,15%). En el portal, 2587 propiedades aceptan seguro de caución.
¿Qué es el seguro de caución?
Es una garantía de alquiler otorgada por una empresa y que protege al propietario en caso de que el inquilino no pague ningún costo o pago. Sirve como garantía de que la empresa cubre el incumplimiento por parte del arrendatario de estas obligaciones.
Con la firma del convenio, la empresa se convierte en garante de los pagos mensuales.
Es un medio otorgado por la empresa donante para garantizar que las obligaciones del inquilino se cumplan de manera oportuna.

A cambio, el inquilino debe pagar a la compañía de seguros una prima, es decir, una suma de dinero que debe pagar la persona que alquila el servicio por la transferencia de los riesgos de que no se cumpla el alquiler durante un período determinado.
Las garantías del seguro de caución pueden variar según la empresa.
En caso de que el inquilino incumpla con sus obligaciones económicas, la empresa que contrata el seguro de garantía indemnizaría al arrendador en unos días.
Luego la empresa informará al inquilino sobre el pago de la deuda con la suma de los intereses y gastos administrativos de diversa índole.
Sirven de protección al arrendador y facilitan el acceso de los inquilinos a una propiedad, aunque no cuenten con garantías propietarias para alquilar, lo que a menudo es difícil de obtener en Argentina.
Requisitos y documentación necesarios
DNI: este documento se solicita a una persona física. No obstante, si es una empresa que lo solicita, se solicitará un documento relativo a la empresa en cuestión.
Contrato preliminar: se trata de un documento legal a ser firmado por las partes, en el que se especifican las fechas de inicio y finalización del alquiler, la dirección, los montos y costos del alquiler mensual y los incrementos semestrales pactados.
Para acceder a este tipo de seguro, el alquiler no tiene por qué superar un determinado porcentaje de los ingresos del inquilino o grupo familiar.
Confirmación: Si es monotributista , el inquilino deberá acreditar sus ingresos mediante recibos de sueldo o facturación anual. En el caso de que una empresa solicite un seguro, deberá presentar su último saldo sellado.
Los pasos a seguir:
Revisión de la documentación: una vez entregada la documentación, la empresa es responsable de evaluar a la persona que solicita el seguro y decidir si se asegura o no en base a información sobre su historial financiero.
Presupuesto: el monto depende del tipo de seguro, pudiendo cubrir la totalidad del alquiler, gastos o impuestos y/o la fianza.
En algunas ocasiones, pagando un precio superior, también es posible garantizar servicios como Aysa y GLA, reconexión de servicios por impago, juicios e incluso ocupación indebida si el inquilino permanece en la vivienda después de finalizado el contrato.
Valor del seguro de garantía: el arrendatario suele abonar una tasa trimestral que representa un porcentaje del alquiler y a esto se le suma el coste del seguro.
Normalmente, el monto total de todos los meses de alquiler que se especifican en el contrato, más el costo del seguro, se suma y se divide en tres cuotas trimestrales.
Otras empresas pagan entre uno y dos meses de alquiler al contado o con posibilidad de pago a plazos con intereses. Sin embargo, es importante señalar que cada empresa tiene sus valores y requisitos propios.